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Viernes, 18 de marzo de 2011   |  Número 4
JOSÉ RAMÓN RUBIO, VICEPRESIDENTE DEL GRUPO HOSPITALARIO QUIRÓN Y DEL IDIS
“Los hospitales privados están a la altura de los centros públicos de élite”
El IDIS servirá para explicar que la sanidad privada “es mucho más que una alternativa”

Javier Barbado / Imagen: Pablo Eguizábal. Madrid
El Grupo Hospitalario Quirón, uno de los patronos del Instituto para el Desarrollo e Integración de la Sanidad (IDIS), ha cerrado los dos últimos ejercicios económicos con una tasa de crecimiento superior al 17 por ciento. Según anuncia su vicepresidente, entrevistado para Publicación de Sanidad Privada, está previsto que, en 2011, llegue incluso al veinte por ciento. A lo largo de la conversación, desgrana las diferentes facetas de la labor del grupo, que dispone de 1.500 médicos vinculados y de una plantilla de 2.600 empleados en numerosos centros ubicados en diferentes comunidades autónomas.

El vicepresidente del Grupo Quirón habla sobre la sanidad privada en España y sobre el IDIS.

Nos gustaría conocer su opinión, desde un punto de vista general, de la sanidad privada en España, de su grado de implantación en el país y en las comunidades autónomas en comparación con otras naciones.

La realidad es que la sanidad privada en España no es un fenómeno nuevo para las compañías del sector, como es el caso de la nuestra, implantada desde hace más de 60 años. Sin embargo, sí es un fenómeno relativamente nuevo en cuanto a su posicionamiento como sector estratégico en la economía española.

Aproximadamente de unos diez años a esta parte, se han hecho importantísimos esfuerzos de inversión en la sanidad privada en España, de tal forma que los hospitales más recientes, los que han recibido instrumentos de última generación en los pasados cinco años, están perfectamente a la altura de lo que han sido nuestros hospitales públicos de elite. Hoy, el paradigma de que si tienes algo grave has de ir a la sanidad pública, y, si es leve, a la privada, es un concepto totalmente superado y, desde luego, los hospitales privados españoles pueden competir en igualdad de condiciones, si no en mejores, con los centros públicos.

Quirón forma parte del Instituto para el Desarrollo e Integración de la Sanidad (IDIS), constituido en junio de 2010. ¿Está satisfecho con esta iniciativa? ¿De qué modo contribuye el grupo a desarrollarla?

Desde un punto de vista corporativo –y desde luego personal–, estamos muy satisfechos de haber participado en la gestión del IDIS, en lo que ha sido su nacimiento y su primer año (ya casi un año) de andadura. El IDIS agrupa todos los intereses que se conciertan alrededor de la sanidad privada. En él estamos grupos hospitalarios y compañías de seguros, y contamos en el futuro también con laboratorios, tecnólogos, empresas fabricantes de tecnología sanitaria... En fin, queremos tener una plataforma alrededor de la sanidad privada que ayude a explicar a la población española que la sanidad privada existe, que está a su servicio y que es mucho más que una alternativa para cuidar de nuestra salud.

Rubio aporta datos de facturación del Grupo Quirón.

Háblenos de la historia del grupo. Cuándo nació y de qué manera ha ido incorporando centros a su red asistencial.

Quirón, en este momento, tiene algo más de 65 años de historia, y como tal holding, fue constituido a finales de los años ochenta. En este momento, agrupa a nuestro hospital matriz, el Hospital Quirón de Zaragoza, con el Hospital Quirón de Barcelona, el Hospital Quirón de Valencia y el Hospital Quirón de San Sebastián.

Con posterioridad a ese grupo de cuatro hospitales que se conformó en los años 90, hemos seguido invirtiendo tanto en edificios como en equipamiento, y así, en el año 1997, se constituyó la Unidad de Reproducción Asistida de Bilbao. En 2004, inauguramos un segundo hospital en Zaragoza conformado como hospital de día de alta tecnología con casi 10.000 metros cuadrados de superficie y dedicado a nuevas tecnologías en tratamientos oncológicos, reproducción asistida… y, en fin, técnicas novedosas de reciente configuración. En 2006, inauguramos Quirón Madrid, y en ese mismo año, en abril-mayo, también procedimos a inaugurar una ampliación de la superficie de Quirón Valencia, de unos 1.000 metros cuadrados, que conforman una mayor oferta hospitalaria y, en julio de 2007, trasladamos la antigua Clínica Quirón de Barcelona a lo que hoy es el Hospital Quirón Barcelona. En 2008, también se trasladó la Unidad de Reproducción Asistida, que ha ocupado una planta en la calle Pérez Galdós, en el antiguo Policlínico Sanatorio, a un local independiente de más de 1.000 metros cuadrados en la zona de Deusto, en Bilbao, y, actualmente, en el mes de noviembre-diciembre del año 2009 inauguramos Quirón Málaga, y, en el mes de enero de 2010, Quirón Vizcaya. En este momento tenemos siete hospitales generales (Barcelona, Vizcaya, Zaragoza, Valencia, San Sebastián, Málaga y Madrid); un Hospital de Día (que es nuestro segundo centro en Zaragoza); y dos centros de Reproducción Asistida, uno de ellos de los más importantes que hay en España, que es el de Bilbao, y otro inaugurado la primavera pasada en Pamplona.

Disponen de una plantilla de 2.600 empleados y de más de 1.500 médicos vinculados al grupo. Parece evidente su contribución a fomentar el empleo en los profesionales sanitarios y, además, descargar al Sistema Nacional de Salud de la asistencia de los pacientes que ustedes reciben. ¿Cómo han sorteado la crisis económica desde 2008 a esta parte?

El entrevistado recuerda que el grupo trabaja con casi todas las compañías aseguradoras de salud españolas.

Como es lógico, sería una banalidad por mi parte decir que no hemos percibido para nada la situación tan grave en la que se encuentra la economía española. Sin embargo, yo creo que el sector sanitario privado en general, y desde luego muy particularmente Quirón, han llegado a esta situación en un estado de fortaleza que le ha permitido sortear la situación mucho mejor que a otros. Cuando se analiza una empresa en una situación de crisis, lo primero que hay que ver es si sus ventas han bajado realmente. Cuando una empresa se enfrenta a una bajada de sus ventas, la situación es muy difícil. Resulta muy difícil adaptar los costes fijos, e incluso los variables, a una situación de falta de ventas. No se ha producido esa situación en general en el sector privado, y, desde luego, no se ha producido en Quirón. Nosotros estamos en tasas de crecimiento superiores al 17 por ciento tanto en el ejercicio de 2009 como en el ejercicio de 2010, y este año superaremos incluso la cifra del 20 por ciento en lo que a nuestro crecimiento se refiere.

¿Con qué aseguradoras de salud trabajan? ¿Cuál es el papel que, en su opinión, deben cumplir estas compañías?

Como es natural, Grupo Hospitalario Quirón trabaja prácticamente casi con todas (si no con todas) las compañías de salud que prestan sus servicios en España. La realidad es que el sector de las aseguradoras de salud sigue siendo un sector muy fragmentado, de tal forma que, en distintas comunidades autónomas (incluso me atrevería a decir que, dentro de éstas, en distintas ciudades) existen particularidades que hacen que la aproximación de un grupo asegurador a una entidad aseguradora difícilmente se pueda hacer de una forma global.

Esto, en definitiva, significa que, allá donde haya un hospital privado, debe negociar con representantes locales de esa ciudad, de las diferentes compañías de seguros, de tal forma que se alcance un acuerdo en prestaciones y puedan contratarse los servicios de cada compañía en beneficio de los poseedores de su póliza de seguros.

Sobre el papel de las compañías de seguros de salud en España, la realidad es que han desempeñado una función encomiable en estos años. En primer lugar, atendiendo al colectivo de Muface, descargan de una manera muy importante al sistema público de salud. Y también garantizan un doble aseguramiento a un significativo número de españoles: por un lado, el de la seguridad social, que como saben tiene carácter obligatorio para cualquier persona que trabaje por cuenta ajena., y, por otro, facilitan un segundo aseguramiento a partir de la suscripción de pólizas de seguros con una compañía de salud, por lo que contribuyen de una manera muy importante a quitar presión a la sanidad pública. La realidad es que, si en España no existiera la sanidad privada, que acapara el 30 por ciento del gasto y quizás un porcentaje aún mayor de la población española, pues quizás sería prácticamente imposible que el sistema público hubiera llegado con esta configuración a nuestros días.

¿Cuál es la situación del grupo en cuanto a facturación y resultado bruto de explotación (el conocido como indicador “Ebitda”)?

Nosotros, en el último año, hemos facturado por encima de los 250 millones de euros. Y, lógicamente, hemos tenido una cifra de resultados que nosotros dividimos entre las que son aplicables a los hospitales que ya existían en 2009 y las nuevas facturas. Como usted sabe, los hospitales son unas entidades con un elevadísimo porcentaje de gastos fijos, ya que cada puesto de trabajo tiene que ser cubierto por cinco personas puesto que permanecen abiertos 365 días al año.

La cifra de Ebitda que el Grupo Hospitalario Quirón habría alcanzado de no existir la apertura de nuevos centros en Bilbao y Malága, habría superado los 20 millones de euros, y lógicamente, ha sufrido las consecuencias de esas aperturas durante el ejercicio de 2010. En 2011, estaremos bastante por encima de los 20 millones de euros, y, en torno a 2013-14, estaremos bastante por encima de 50.

¿Cuándo se creó y qué funciones desempeña la Fundación Quirón?

José Ramón Rubio explica la historia remota y reciente del Grupo Hospitalario Quirón.

La Fundación Quirón es una institución que nuestro presidente fundador, el doctor Publio Cordón, quiso instituir en memoria de su hijo Publio Jorge Cordón, que falleció a principios de la década de los noventa. La Fundación Quirón tiene principalmente tres vocaciones. Por un lado, la vocación de proporcionar salud a países que, por su extrema pobreza, no lo pueden costear y no pueden atender a su población adecuadamente y, en este sentido, tenemos varios programas de vacunación a países y a colectivos como, por ejemplo, a un colectivo muy importante de niños en el Chad. Se trata de vacunaciones contra enfermedades primarias pero, con ello, se contribuye mucho a mejorar el nivel de salud en determinados grupos de población.

Por otra parte, también prestamos asistencia sanitaria en España a personas de terceros países que, por las razones que sean, no pueden adquirir, bien por falta de medios económicos, bien por falta de medios técnicos, la práctica y tecnología médicas necesarias. Con frecuencia traemos a España a personas que padecen distintas enfermedades, problemas de reconstrucción traumatológica o incluso estética (por ejemplo, un muchacho afectado por minas anti-persona, para contribuir a ayudarle y a mejorar su vida).

También tenemos una vocación de investigar en beneficio de la salud de la humanidad, y, en ese sentido, se dirigen desde la Fundación toda una serie de ensayos clínicos y de colaboraciones en investigación, de tal forma que, en este momento, el Grupo Hospitalario Quirón está participando en más de cien ensayos clínicos y estamos dirigiendo un programa de investigación sobre remodelación cardiaca para el CDTI, con una dotación de unos 30 millones de euros y un plazo de cuatro o cinco años, en el que lideramos y tenemos la responsabilidad de los trabajos que se llevan a cabo. Este grupo está conformado por una decena de empresas con diferentes grados de participación en el proyecto.

El Grupo está presente en varias comunidades autónomas. ¿Es diferente la relación con la administración en función de la autonomía de que se trate?

Difícilmente podemos percibir una diferencia de trato o de relación en consideración de las diferentes comunidades autónomas. La realidad es que, al fin y al cabo, nosotros prestamos servicios de salud y éstos, como es natural, siempre son bien percibidos y recibidos. Otra cuestión es el diferente grado de participación que tengamos con las administraciones públicas en concertaciones, colaboraciones, listas de espera o incluso me atrevería a decir en facilidades para trabajar juntos en líneas de investigación y demás. Pero, desde luego, en cuanto a trato y consideración se refiere, difícilmente podríamos establecer diferencias. Es magnífico en todas.

¿Detectan déficit de médicos o de otros especialistas en la sanidad privada?

La realidad es que, en este momento, no percibimos una falta de médicos especialistas en España en términos generales en la sanidad privada. Sé que en 2007 y 2008 hubo alguna excepción, especialmente en algunas áreas como la pediatría y la ginecología, donde sí que percibimos escasez de profesionales cualificados.

Ocurrió lo mismo con la enfermería, pero, al menos para el Grupo Hospitalario Quirón, es una situación totalmente superada. Pero no podría generalizar en todo el sector. La realidad es que, en este momento, el Grupo Hospitalario Quirón tiene un 92 por ciento de su superficie asistencial con una antigüedad inferior a cinco años, lo que conlleva que todos sus equipamientos tecnológicos también tienen una antigüedad de menos de cinco años, a lo que hay que añadir los magníficos servicios hosteleros de que disponen los centros. Todo ello hace que podamos tener más facilidades que otros para atraer talento médico y de enfermería hacia nuestros hospitales.

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